El huevo: fuente de proteína excelente
Si alguna vez te has preguntado por qué la proteína del huevo se considera de referencia para evaluar la calidad de las proteínas de otros alimentos, estás a punto de descubrirlo. Más allá de su delicioso sabor y versatilidad en la cocina, el huevo es un alimento con numerosos nutrientes en cantidades elevadas y muy biodisponibles. Y destaca su proteína como la de mayor calidad nutricional. Aquí te contamos por qué…
¿Qué hace tan especial a la proteína del huevo?
Hay casi 13 gramos de proteína en 100 gramos de huevo (lo que pesan aproximadamente dos huevos medianos), y este aporte es más del 25% de la que se recomienda ingerir diariamente para un adulto. Además de satisfacer nuestro apetito, la proteína del huevo tiene un valor biológico excepcional. ¿Qué significa esto? Que es la proteína más parecida a la que nuestro cuerpo necesita para formar y reparar nuestros tejidos, porque la concentración y proporción en que se encuentran los aminoácidos que las componen. Hay que recordar que la proteína del huevo se encuentra tanto en la clara (también llamada albumen) como en la yema.
¿Y se aprovecha mejor por nuestro organismo la proteína cruda o cocinada? En el caso del huevo, las proteínas de la clara se digieren parcialmente por nuestro organismo si esta se consume cruda. Al cocinarla, la digestión es total y se aprovechan mejor todos sus componentes. Pero el caso de la proteína de la yema es distinto y, aunque se consuma sin cocinar, sus proteínas se aprovechan totalmente. Por eso, el huevo frito, con la clara coagulada y la yema líquida, es una forma de preparación que nos permite aprovechar las proteínas del huevo sin problemas. Curioso, ¿verdad?
La albúmina: principal proteína de la clara de huevo
La clara de huevo es la parte que contiene la mayor proporción de proteína, y entre sus componentes destaca la albúmina, la proteína mayoritaria de la clara, que le da nombre también, ya que se considera “albumina” sinónimo de clara de huevo.
La albúmina es responsable de que la proteína de la clara se coagule con el calor, y también de la estructura aireada de los alimentos preparados con clara. Estas son propiedades fundamentales que hacen que el huevo sea un ingrediente esencial y muy apreciado en la cocina, gracias a sus proteínas.
¿Para qué sirven las proteínas del huevo?
En nuestro organismo, las proteínas contribuyen a aumentar y conservar la masa muscular. También ayudan al mantenimiento de los huesos en condiciones normales.
La elevada calidad y biodisponibilidad de la proteína del huevo la convierte en una gran fuente de nutrientes en las primeras etapas de la vida: durante el desarrollo del embrión y del bebé lactante, y después para el crecimiento de los niños.
Es esencial para los deportistas y personas con mucha actividad física, porque contribuyen a la formación del músculo. Y en las personas mayores, ya que les ayuda a contrarrestar la pérdida de masa muscular asociada a la edad.
Además, por su alto valor nutricional, el huevo es un alimento con una gran capacidad saciante, lo que hace que tenga un interés especial en las dietas de adelgazamiento. Algunos estudios muestran que incluir huevos en el desayuno cuando se sigue una dieta hipocalórica favorece una mayor pérdida de peso, ya que el huevo favorece la sensación de saciedad, y ayuda a mantener la dieta evitando la sensación de hambre entre horas.
