Tortilla de patata saludable: 3 recetas para disfrutar sin remordimientos
Vale, lo confesamos: en Los Juegos del Huevo somos muy de tortilla de patatas. ¡Cómo no íbamos a serlo! Es uno de los iconos de la gastronomía española y un plato que tiene todo lo bueno de la vida: sencillo, sabroso y completo. Porque sí, la tortilla de patatas no solo está rica, es un auténtico combo nutricional.
Por un lado, tenemos el huevo, un alimento completo que aporta proteínas de calidad, vitaminas, minerales y todo lo que necesita tu cuerpo (y tu mente) para funcionar a tope. Y por el otro, la patata, que aporta carbohidratos, vitamina C y fibra. Justo lo que le falta al huevo. Vamos, que juntos forman un equipo ganador.
Pero antes de lanzarnos a la cocina, hagamos un viaje rápido al pasado…
¿De dónde viene la tortilla de patata?
La tortilla de patata —o tortilla española— es uno de los protagonistas de nuestra cocina tradicional. ¿Su origen? Pues como pasa con los grandes mitos, tiene varias teorías.
Navarra se lleva la fama con la historia más conocida: allá por 1835, en plena Primera Guerra Carlista, el general Tomás de Zumalacárregui buscaba un plato barato y nutritivo para sus tropas. Una campesina navarra le preparó con lo poco que tenía —huevos, patatas y cebolla— la primera tortilla de patatas de la historia. Y el resto… es leyenda.
Pero ojo, porque en Extremadura también reclaman su parte de la historia. Según algunos documentos de 1798, ya se preparaba una especie de “pan de patata” muy parecido a nuestra tortilla actual en Villanueva de la Serena (Badajoz). ¿Quién tiene razón? Nunca lo sabremos, pero lo que está claro es que esta maravilla conquistó nuestras mesas y nuestros corazones para siempre.
Y lo mejor es que, además de ser una receta con historia, la tortilla de patatas es un plato completo y nutritivo. El huevo aporta proteínas, vitaminas y minerales, y la patata nos da esos hidratos de carbono y vitamina C que necesitamos para el día a día.
¿Y si encima te decimos que puedes hacerla un poco más saludable sin perder ni un gramo de sabor? ¡Pues allá vamos!
Te contamos 3 formas de hacer una tortilla de patata saludable. ¡Apunta!
Tortilla de patatas al microondas: el clásico renovado
¿Quién dijo que el microondas solo sirve para (re)calentar? Aquí te traemos la versión rápida y ligera de la tortilla:
¿Cómo se hace?
– Pela las patatas y córtalas en rodajas finitas. La cebolla, a cuadraditos pequeños.
– Pon todo en un recipiente apto para microondas, añade 4 cucharadas de aceite de oliva y remueve bien.
– Cubre el recipiente con film transparente y asegúrate de que no quede ninguna rendija.
– Meterlo al micro a máxima potencia durante 15 minutos. ¡Ojo al quitar el film, que quema!
– Bate los huevos, mezcla con las patatas y cebolla cocidas, y añade sal al gusto.
– Cuaja la mezcla en una sartén antiadherente con unas gotitas de aceite. Dale la vuelta según tu gusto: 30 segundos por lado si te gusta jugosa, o un minuto y medio si prefieres la tortilla bien cuajada.
Resultado:
Una tortilla jugosa, con mucho sabor y bastante más ligera que la tradicional. Perfecta para una cena rápida o para llevar en el tupper. Recuerda: cuaja bien las tortillas si no las vas a consumir inmediatamente.
Tortilla de patatas en freidora de aire: ligera pero sabrosa
Sí, amigos y amigas, la freidora de aire también sirve para preparar tortillas de patatas. Y queda espectacular.
¿Cómo se hace?
– Pela y corta las patatas en láminas finas, añade sal y un chorrito de aceite. Remueve bien.
– Cocina las patatas en la freidora de aire a 200º durante 25 minutos, removiendo de vez en cuando.
– Bate los huevos con un poco de sal y mezcla con las patatas ya hechas.
– Forra un molde redondo con papel de horno, vierte la mezcla y cocina en la freidora a 180º durante 10 minutos.
– Saca la tortilla, dale la vuelta y cocina 5 minutos más a 180º.
Resultado:
Una tortilla con menos grasa pero todo el sabor. Ideal como plato principal si la acompañas de una buena ensalada o un gazpacho. ¡Planazo de verano!
Tortilla de patatas con verduras: más color, más sabor
Si quieres darle un plus de vitaminas, minerales y fibra a tu tortilla, añade unas verduritas y tendrás un plato aún más completo.
¿Cómo se hace?
– Pela y corta las patatas en dados.
– En una sartén con un poco de aceite, empieza sofriendo cebolla y pimiento. Luego añade el resto de verduras que te gusten (calabacín, judías verdes cortadas finitas, espinacas… lo que tengas a mano).
– Cuando las verduras y las patatas estén tiernas, bate los huevos, mezcla todo y cuaja la tortilla como siempre.
Versión exprés en microondas:
– Pon las verduras y las patatas con un chorrito de aceite en un bol.
– Al micro a máxima potencia 8-10 minutos hasta que estén blanditas.
– Mezcla con los huevos batidos y cuaja la tortilla en la sartén.
Resultado:
Una tortilla más colorida, rica en fibra, perfecta para los que quieren comer sano sin renunciar al sabor.
El huevo: el auténtico protagonista
Recuerda que el huevo es el alma de la tortilla. Gracias al modelo europeo de producción, tenemos huevos de la mejor calidad: frescos, nutritivos, seguros y producidos respetando el bienestar animal y el medio ambiente. Por eso, cuando los bates y los cuajas… ¡la tortilla sabe a gloria!
¿Y lo mejor? Que el huevo es alto en proteínas y está cargado de vitaminas como la D y la B12, y minerales como el fósforo o el hierro. Vamos, un imprescindible en tu dieta.
¿Y tú, cómo la prefieres?
Con cebolla o sin cebolla, cuajada o jugosita, clásica o tuneada… La tortilla de patatas siempre es un acierto. Y ahora, con estas versiones más saludables, ¡ya no hay excusas para no disfrutarla siempre que quieras!